Según Gartner, el gasto global en seguridad de la información alcanzará los 212,000 millones de dólares en 2025, con un aumento del 15.1% respecto a 2024. Debido a esto, NTT DATA y Palo Alto Networks integran IA avanzada para desarrollar Managed Extended Detection Response, una solución que brinda monitoreo continuo, detección y respuesta rápida ante amenazas, protegiendo a las empresas desde la nube hasta el edge.
NTT DATA y Palo Alto Networks ayudan a las empresas a proteger sus infraestructuras digitales
Las organizaciones hoy en día enfrentan un volumen sin precedentes de amenazas cibernéticas sofisticadas a lo largo de todas sus operaciones, ya que dependen de sistemas de seguridad fragmentados, lo que dificulta detectar amenazas avanzadas y reaccionar rápidamente.
Combinando capacidades, NTT DATA ha anunciado una ampliación de su colaboración con Palo Alto Networks para fortalecer la seguridad de infraestructuras digitales en empresas globales, cubriendo desde la nube hasta el edge extremo de sus entornos, donde las empresas pueden mejorar su resiliencia cibernética mediante la integración de tecnologías innovadoras, inteligencia de amenazas y experiencia en seguridad global. Como resultado, los clientes obtienen una vista unificada de sus datos y operaciones de seguridad en una plataforma centralizada, lo que optimiza sus operaciones y refuerza la prevención de ataques.
Cortex XSIAM de Palo Alto Networks, una plataforma impulsada por IA
El nuevo servicio Managed Extended Detection Response proporciona detección de incidentes y respuesta 24/7 según indica la marca, respaldado por un equipo global de operaciones, orquestación de inteligencia de amenazas impulsada por IA y automatización. Utiliza aprendizaje automático para detectar amenazas de manera avanzada, con el apoyo de un equipo de expertos en seguridad, incluyendo gestores de seguridad de la información, cazadores de amenazas, forenses digitales y profesionales certificados.
Al integrar inteligencia de amenazas en tiempo real, protege proactivamente a los clientes de riesgos emergentes en un entorno cibernético en constante cambio. Esto permite reducir la complejidad operativa, mejorar la gestión de recursos y disminuir el costo total de propiedad (TCO).
